lunes, 3 de octubre de 2011

ARGENTINA 2011 (16ª PARTE)

DÍA 16. 2 DE OCTUBRE. USHUAIA

Hoy toca hacer traslado de hotel. Hay que dejar el que estamos a las 10.00 para ir a uno que está muy cerca, pero al cambiarnos el vuelo, como dije, tuvimos que reservar una noche en un sitio diferente. MJ y yo, como no salismos ayer, nos levantamos a las 8.30 para desayunar y preparar todo, pero a Lan y Sergio se les alargó la noche bastante, así que a las 10.00 todavía estaban en la cama y ha costado lo suyo despertarlos. ¡Menuda resaca!
Lo primero que hacemos es coger un taxi a la Hostería del Recodo (12 pesos, 14 euros la noche por persona con desayuno en habitación de cuatro), y luego ir a que estos dos figuras desayunen algo en el pueblo, que se mueren de hambre. Después tomar cafés y hamburguesas, decidimos hacer una excursión rápida al cercano Cerro Castor. Vamos a la estación de líneas regulares de furgonetas, como ayer, y nos cobran 40 pesos cada uno por llevarnos y traernos.
Llegamos en media hora, y nada más llegar vemos que en la cafetería está la selección francesa de esquí entrenándose para la próxima competición internacional que tienen. Aquí hoy hace un frió horrible y, como hay más nieve que en Europa, se vienen aquí a preparar la competición. Las vistas desde allí son muy buenas de los cerros nevados de alrededor, pero es sólo una estación de esquí alpino, con telesillas y varias pistas.

Como nosotros no tenemos intención de esquiar (casi ninguno sabemos), nos damos una pequeña caminata hasta el cercano centro llamado Las Cotorras. Allí se puede esquiar con paletas, trineos, motos de nieve e ir en un trineo tirado por perros husky siberianos. Optamos por eso, ya que además nos habían dicho que alía unos 130 pesos y vemos que allí vaía 80. Es un centro donde tienen cerca de cien perros de tiro, los acariciamos, jugamos con ellos un rato (son muy cariñosos) y después de tomar un café y unas pastas a las que nos invitan mientras esperamos, nos montamos en los trineos.
Hace un frío que pela, y nos montamos dos en cada trineo con doce perros tirando en cada uno y un conductor, por llamarlo de alguna manera. Hay tramos en los que nos llevan a 20 kilómetros, y es una experiencia interesante, aunque no hay demasiada nieve para gozarla con mucha velocidad. Volvemos tras hacernos unas fotos y nos dicen que vale 150 pesos por persona, cuando en el cartel pone 80. Nos hubierda dado igual pagarlos si desde el principio te dicen ese precio, pero esos carteles son, como mínimo, publicidad engañosa para la gente. En fin.
Nada más terminar comemos en el conocido restaurante de Las Cotorras (churrasc o, pasta, salmón...), nos damos un paseo y nos volvemos al hotel, todo hecho de madera, parece la casa de Los Picapiedra. Son las seis, pero a alguno le está pasando factura la juerga, así que nos relajamos y nos tomamos algo en el bar antes de cenar e irnos a la cama. Mañana nos levantaremos para las 7, ya que a las 9.15 sale el vuelo para El Calafate, que dura poco más de una hora. A ver si hace un poco menos de frío que aquì y no llueve, que parece que lleva unos días diluviando.

No hay comentarios: